Hace ya unos cuantos años que conocí una chica azul.
No esta demás decir que nos odiamos desde el primer momento en que nos vimos y si sera cabrón el destino que en ese momento nos juntaba a fuerzas.
Ese era mi pensamiento en ese entonces pero poco a poco y mientras la conocía y me adentraba en ella, fui cambiando mi forma de odiarla hasta terminarla amando.
Describirla sera complicado pero imagina que tienes a la chica mas genial, loca, divertida, es como estar junto a un comediante pero que a su vez puede hacerte reflexionar de maneras estrepitosas y fue todo esto lo que hizo que pasara de odiarla a amarla.
Solíamos vernos 3-4 veces por año, el equivalente a nuestras crisis personales, especialmente las mías, un desastre andante desde siempre.
Nos veíamos tan poco pero a su vez era mas que suficiente, al punto de cambiar mi vida por completo, ahora digo que una chica azul me rescato de mi mismo y creo que nunca podre pagarle todo lo que hizo por mi.
Le debo mi estabilidad emocional y esta plenitud es inexpresable.
Ahora hablo de ella como en su momento hablaba de una bonita historia amorosa que viví, hablo de ella con pasión y sobre todo con todo el amor que le tengo.
Ahora quiero comerme el mundo gracias a ella.